jueves, 16 de julio de 2009

Las cosas en su lugar.

Rodrigo Palacio finalmente pegó un pase a Europa. Irá a jugar a Genoa, por una suma de 5 millones de euros para Boca, club donde ganó muchos títulos y donde es ídolo. Finalmente, después de inventarle intereses por 20 millones de euros de Barcelona, Lazio, Deportivo La Coruña, Sevilla y demás clubes durante 3 años, se fue a Genoa por 5 palos, menos que Falcao, un tipo resistido por estos pagos, que se fue a Porto por 5,5 millones de la misma moneda. Está bien que Palacio no estuviera en su mejor momento, pero cuando sí lo estuvo, nunca se fue. Y después del Mundial 2006, nunca fue el mismo.

Hace más o menos cinco años, después de que Boca se consagrara campeón de la Copa Libertadores 2003 (la que ayer ganó Estudiantes, reitero mis felicitaciones para el León), el periodismo deportivo, gráfico, radial y televisivo, se dio cuenta de que había una brecha muy grande para explotar. Y actuó en consecuencia.

Canal 13 adquirió los derechos de televisación de los partidos del Xeneize en la Copa, cuando en toda su historia había transmitido un partido que no fuera de la Selección, pagándole una fortuna a un relator insoportable como Vignolo y a una eminencia (a mi forma de ver un poco gastada) como Macaya Marquez para relatarlos y comentarlos, respectivamente. Programas de fútbol en la televisión de cable se vieron primero copados, luego infestados por "hinchas con micrófono" pagos por ensalzar las virtudes del Boca multicampeón del universo conocido e incluso estuvieron al aire programas enteramente partidarios al mejor estilo Boca TV, siendo el más desagradable de todos, por lejos, el que condujo por Fox la hija de Maradona. Periodistas con más prestigio fueron convencidos económicamente, también, pera exacerbar las virtudes del club de la Ribera, que obviamente existían, pero eran llevadas al punto del ridículo para el lector/televidente con dos dedos de frente.

Los jugadores de Boca que evidentísimamente no estaban (ni están) a la altura de la selección eran pedidos constantemente, con una maquinaria de publicidad (el lobby existía desde antes) pocas veces vista hasta ese momento, pero con una efectividad notable. Pronto, jugadores como Insúa, Bilos, Battaglia, Tévez, Palermo, Palacio, Banega, Gago, Riquelme, e incluso el paraguayo Morel Rodriguez (en un acto cúlmine de la estupidez de los periodistas groupies), en distintas épocas, fueron pedidos por este pseudo-periodismo en muchísimos espacios, y todos ellos (salvo Morel, por supuesto) fueron correspondidos con convocatorias, e incluso participaciones en Mundiales, siendo en todos los casos (excepto Gago, en mi opinión), jugadores no aptos para representar al fútbol Argentino, la mayoría, o jugadores de gran desempeño a nivel clubes y de pases millonarios a Europa, pero actuaciones endebles con la Albiceleste, donde no convencieron a nadie. Esto sigue ocurriendo. Riquelme y Tévez son los casos más claros: ninguno de los dos ha pagado realmente su deuda futbolística con la selección, pero aún son convocados, e indiscutibles en su momento, teniendo actitudes que, en otro contexto, les hubieran costado su lugar, como sin margen de dudas les costó a otros jugadores; basta citar a Redondo, marginado por mucho menos que eso.

Todo este circo que montó el "Mundo Boca" sirvio (y todavía opera) para satisfacer la voracidad de quienes manejan pases de jóvenes promesas, surgidas de inferiores o llevadas de otros clubes a Boca. Es así como pibes con poquísimos partidos en primera, como Monzón, Cahais, Banega, Nery Cardozo en su momento, Pablo Ledesma o Maidana se fueron a Europa en grandes sumas, y ahora tuvieron que volver, o se fueron a una liga de segundo orden, un equipo chico de alguna liga importante en el mejor de los casos. A esos jugadores (quizás excelentes, no sé, porque tuvieron 10 partidos para juzgar y no es medida) los quemaron, vendiéndolos como cracks. Al primer bajón en su rendimiento, cosa lógica y hasta esperable en un juvenil, estos juveniles no fueron tenidos en cuenta por sus nuevos clubes. Y si a eso se le suma una más que posible falta de talento, la edad de estos jugadores y las circunstancias adversas, lo más factible es que les cortaran la carrera. Así es como Banega vagabundea por el fútbol español sin poder hacerse un lugar en ningún lado después de ser pagado 27 millones de dólares.

Asímismo, la factoría de humo pro-Boca sirvió de precedente para el negocio de otros clubes, o de representantes. Y el fútbol dio muchos pasos hacia el negociado. Las convocatorias a la selección para usarla de vidriera le sirvieron no sólo al club de la Ribera: Estudiantes fue quien mejor supo aprovechar eso y metió a Andujar de arquero titular en la selección, para venderlo a ¡Catania! por 3 millones de euros. Independiente hizo lo mismo con Ustari, obteniendo mayores dividendos, y con Denis. Vélez también, primero con Somoza, Papa y Jonás Gutierrez y ahora para salvar la década económica con Otamendi. Así, jugadores excelentes que no necesitaron lobby para irse a Europa se ven relegados ante un grupo de colegas que, en caso de jugar en serio eliminatorias o un Mundial, no le gana a nadie.

Pero todo este sistema no se instaló solo. Los hinchas del éxito fueron quienes le dieron entidad a la mentira, empañando el juicio propio y el ajeno, categorizándolo como "Antiboca" y negándole la posibilidad de crítica constructiva, lo que generó obvias antipatías por parte de hinchas otrora neutrales o incluso con cierta simpatía por la institución. De tanto bombardeo propagandístico, mucho público consumidor terminó realmente convencido de que poniendo a 9 jugadores de Boca (o identificados con el club, como el caso del Cata Díaz) más alguno que otro de Europa "indiscutible" (Mascherano, Messi) como titulares en la selección, Argentina iba a ganar un Mundial. Es de esta manera que tipos como Aimar, Saviola, Cristian Ledesma, Carrizo, Ezequiel Garay, Gonzalo Higuaín, Mauro Zárate o Cavenaghi son suplentes o, en mayor número, ni siquiera convocados.

Toda esta parafernalia boquense dejó muchísimo rédito, mientras el Club tuvo que desprenderse del "mejor delantero del país de los últimos 5 años", supuestamente regalándolo, para cerrar en verde el balance, a un club de medio pelo que está en racha, pero que ni en pedo puede tener expectativas de, por ejemplo, un Scudetto. ¿Quién ganó con todo esto?

Con Lugüercio era afano (?).

Dijimos que era muy difícil, sí. Pero no dijimos que no se podía. Nos entró a medias entonces (?).

Verón jugando bien, directamente parado los últimos 20 minutos. Muy bien Ré, según algunos "el que hace que tipos intrascendentes como Cellay parezcan excelentes defensores". Bien, hay que decirlo, Gastón Fernandez, a quien tantas veces he atacado, no exactamente en este blog pero en otros, por su carácter de pechofrío en los partidos importantes. La Gata jugó bien y fue importante. Mención también para Boselli, acallando rumores sobre cierta amargura (no es lo mismo pecho que amargo) y erigiéndose goleador en las instancias importantes. Mauri selección (?).

Cruzeiro, poco y nada. Intrascendencia para el bodrio que fue el primer tiempo. Pegó un gol de culo en el segudo, aprovechando un rebote en Desábato (te pasa por poner la mano adelante) y, cuando al toque llegó el empate, se desmoronó totalmente. No encontró respuesta para hacer pesar su localía y vio cómo le daban vuelta el partido cuando más merecía perderlo. Sobre el final tuvo un remate que casi tira el arco abajo del golpe en el travesaño, pero hubiera sido injusto.

Digámoslo, El León no sólo ganó, sino que lo hizo con autoridad y se verá las caras con Barcelona y los otros (?) en Diciembre, en el marco del Mundial de Clubes. El único club argentino que puede decir "yo fui a Japón y Dubai, tripero tekerematá" (?). Obtuvo su cuarta Copa Libertadores, afirmándose en el tercer lugar del podio de los más ganadores del país. Ya habíamos dicho que iba a ver revancha. Felicitaciones!

miércoles, 15 de julio de 2009

De la final de la Libertadores.

Estudiantes es un equipo bastante rácano y un poco mecanizado en sus variantes, ideal para jugar la copa, con sendas líneas de 4 muy compactas, un 5 adelantado excelente como pasador en largo, un media punta jugando en la última línea de los defensores y un 9 que puede tirarse a pivotear. Avanza triangulando y es jodidísimo hacerle goles.

Cruzeiro es un equipo brasilero clásico y que tantos réditos le ha dado al fútbol; volantes centrales con más juego que marca, laterales con poca marca pero con exhuberante despliegue y tremenda pegada, un 9 tanque, un segundo delantero ligerito, también sabe armar triangulaciones, es endeble atrás y MUY ancho por las bandas.

De visitante, los de Belo Horizonte se paran bien atrás y te salen en dos toques de contra. De local no la podés sacar de tu área. Jugando cualquiera de estos dos planteos de partido, allá en Brasil, ya mismo digo sin miedo que Estudiantes pierde. Pero no es la única alternativa.

ELP tiene que pararse en un punto intermedio, lejos de Andujar pero no demasiado, fundamentalmente manteniendo la cohesión de las líneas de fondo y media para atorar la creación y los remates de media distancia brasileros, cortando con falta en el mediocampo o adelante si hace falta. Esto va a derivar en un equipo local atacando a los pelotazos frontales, siendo el juego aéreo el punto más alto de la defensa Pincha, y a los cambios de frente, que por las dimensiones del campo pueden quedar cortos y dejar al equipo mal parado. Mucho despliegue, pero inteligentemente: el Mineirão es muy grande y, por costumbre y físico, los Mineiros saben aprovechar esas cualidades mejor que los Platenses. Evitar el desgaste inútil es muy importante, porque el alargue viene 90 minutos después del partido; un equipo cansado da muchas ventajas en los últimos minutos, y Estudiantes no puede darse el lujo de perder por ningún resultado porque no pudo sacar ventajas en la ida.

Jugar con el público puede ser útil, pero no definitivo. Aunque la gente en el estadio va a ponerse impaciente si el partido sigue 0 a 0, digamos, a los 30 del primer tiempo, los equipos que llegan a la final de la copa tienen mentalidad como para evitar la presión extra. La única forma de maniatar a los brasileños y realmente ponerlos nerviosos es ganando el medio, teniendo razonablemente la pelota y aportar corriendo la mayoría numérica en las transiciones entre ataque y defensa, jugando a las espaldas de los laterales, que es como se le juega en verdad a este tipo de equipos. Abrir a los marcadores centrales y aprovechar la proyección de los marcadores laterales para partir la defensa por el medio y entrar por ahí.

No me animo a avizorar un resultado. Sí a opinar que Cruzeiro es más equipo, invicto en la copa en esa cancha, con un antecedente ante Estudiantes jugando de local (0-3 perdió el León), y que los representantes argentinos en esta 50º Copa Libertadores deberán ser muy inteligentes para ganar en una cancha históricamente complicada.

domingo, 12 de julio de 2009

Empezamos con las predicciones.

Si este bulto realmente firma con Racing, en el clásico la mete. No pensamos nombrarlo. Sobre su rendimiento tampoco vamos a hablar; ya mandamos a Dani Vega al Nacional con San Martín de Tucumán, así que no queremos quemar a nadie más. Pero los hinchas de Independiente ya están advertidos.

Tampoco podemos aseverar cómo lo va a festejar. Capaz pinta toma de genitales (?) hacia la parcialidad roja que desde ese momento lo marca para siempre, o capaz se toma las manos pidiendo disculpas por sus buenos recuerdos en el club. No nos arriesgamos a eso. Sólo sepan los hinchas Rojos que cae el centro, la peina un jugador de la Academia, llega Damián por el segundo palo y se quieren matar. Sólo eso sepan (?).

lunes, 6 de julio de 2009

Los mejores del torneo.

Bue, LR! se me adelantó pero como lo prometí unos posts atrás, acá están aquellos que se destacaron estos 19 partidos. El sistema es 4-4-2, clásico. Las posiciones podrían no coincidir (?) pero bueno, es sólo un criterio.

- Diego Pozo: Sin dudas, el mejor y el más regular. Seguro para salir a cortar centros, rápido en los mano a mano, y transmitiendo seguridad en todo momento.

- Iván Pillud: Una grata aparición el pibe ya vendido a Espanyol. Bien en las proyecciones, solvente para cerrar y aceptable pegada lo metieron en una posición que tuvo grandes desempeños.
- Nicolás Otamendi: Pensar que debutó en primera este torneo. El mejor defensor del campeonato. Impasable mano a mano, de buen juego aéreo y férreo para marcar; se comió crudo a más de un 9.
Matías Martínez: se erigió como goleador (!) de un Racing que se mantuvo varios partidos sin recibir goles por su gran labor. A su gran criterio en el área le suma un enorme sentido táctico en las pelotas paradas, gracias al cual metió 4 goles en el torneo y despejó mil en defensa.
Emiliano Papa: Tiene lo que necesita un lateral: pique, pegada y mucha inteligencia para hacer las transiciones en ataque y en defensa.

Eduardo Salvio: confirmando lo que se esperaba de él. En un torneo en el cual el talento de Lanús estuvo muy opaco (Blanco muy caído, Valeri irreconocible), el pibe solito se cargó al equipo en varias ocasiones.
Franco Razzotti: otra gran producto de las inferiores de Velez. Aguerrido como pocas veces vi en un pibe, se hizo patrón del medio en muchos partidos y de ahí supo hacer la más simple largándola corta a un compañero.
Mario Bolatti: Crack. Cabeza siempre levantada, siempre ojeando a los costados, marcando cuando se pide y yendo al frente. A eso le sumó el remate de media distancia y buen cabezazo. El más inteligente de todos, por lejos, siempre bien parado. Figura del torneo.
Javier Pastore: otro que se destapó. Dueño de una elegancia que pocas veces se ve, una técnica en espacios reducidos envidiable y un gran olfato para asociarse con sus compañeros o llegar al gol. A su favor jugó el hecho de que las pide absolutamente todas. Este torneo la rompió.

Leandro Caruso: También, en una baldosa te limpia. Exponente del fútbol champagne (?) que jugó el muy buen equipo que es Godoy Cruz este torneo. Usando de forma exhimia el cuerpo, aprovechando su técnica depurada y buena definición, pegó un pase a Udinese.
José Sand: Qué decir del Pepe. Parece haber madurado en Lanús. Al igual que su compañero de ataque en este 11, pone muy bien el cuerpo, juega muy bien en la línea de los defensores y es muy versatil para rematar. Apertura y Clausura lo tuvieron goleador.

Banco:

- Pablo Migliore: quien escribe no puede creer el nivel que mostró. Afirmando la habilidad para cortar centros mostrada ya desde que estaba en Huracán, le sumó grandes atajadas que en ocasiones valieron partidos para Racing y mucha constancia, cosa que nunca había tenido.
- Carlos Araujo: parecía un lateral brasileño. Hasta llegó al gol (!) proyectándose y apareciendo como opción de pase siempre. Muy atento para volver y cerrar la salida de su central.
- Paolo Goltz: Goles clave, mucha firmeza e inteligencia para tapar las cagadas de su compañero de zaga Eduardo Dominguez. Ya había tenido un buen torneo antes, ratificando su buen nivel.
- Sebastián Romero: Solito corrió más que el resto de sus compañeros del lobo juntos. Puesto de lateral, volante izquierdo o de 5, rindió en todos lados y se hizo bandera del sacrificio de Gimnasia para lograr la promoción, con un equipo que muchos pensaban descendido, salvo yo, claro (?).
- Sebastián Prediger: Y sí. Mostrando un timing impecable, distribuyendo la pelota por todo el Cementerio de los Elefantes, se ganó su lugar y sus convocatorias a la selección local.
- Carlos Luna: la muestra de que el fútbol da revancha. Figura de un ascenso con Tigre, no hizo pie en Racing y baldoseó en Quilmes. Victoria lo rescató y el Chino cumplió: 11 goles, figura excluyente de su equipo que se tomó seis meses sabáticos y clasificó a la Sudamericana, hay que decirlo, sólo por él, que levantó solo más de un partido.
- Esteban Fuertes: otro premio a la vigencia del Bichi. 23 goles esta temporada, un sacrificio impropio para alguien de 36 años, y mucho olfato goleador lo pondrían como titular indiscutido si no estuviera el apabullante momento de Sand.

Menciones especiales:

- Lucas Aveldaño: es limitado con la pelota, pero este torneo lo mostró impasable de arriba y rapidísimo en los anticipos.
- Matías De Federico: el pibe fue clave en el juego de Huracán. Quedó afuera por comerse tantos goles.
- Cristian Sanchez Prette: jugó muy poco en el torneo. Con poco tiempo, demostró.

Top 3 jugadores del torneo:

1) Mario Bolatti
2) Javier Pastore
3) Nicolás Otamendi

Revelación:
Nicolás Otamendi

Mejor jugador de la temporada:
José Sand. 28 goles esta temporada.

Mejor equipo
:
Huracán, este torneo.
Lanús, en la sumatoria de ambos. Por lejos.


Cuando pinte (?), mando los peores. Otra vez es difícil elegir, eh...

domingo, 5 de julio de 2009

Vélez campeón.

Y sí. El equipo de Liniers me la mandó a guardar. Honestamente, no pensé ni ahí que, después de empatar con Racing y perder la punta, los dirigidos por Gareca pudieran recuperarse y ganar el torneo.

Pero el fútbol es así. Razzotti se comió a Bolatti y Huracán no dio tres pases seguidos, instigado por el lamentable estado de la cancha por el granizo, y el aún más lamentable arbitraje de Brazenas (el peor del año) que permitió un juego por momentos asperísimo. Así, Vélez le ganó bien a un equipo que durante el torneo había generado simpatías en aquellos no hinchas (yo mismo incluido) y ganó, también con total justicia, un torneo que lo tuvo como animador desde el principio. Cimentado en un arquero seguro como Montoya, una dupla central exhimia con Otamendi - la revelación - y Sebastián Dominguez. El gran laburo de los laterales (sobre todo Papa), otro destape como el de Franco Razzotti que se jugó la vida, el oficio y la garra de Cubero, el buen juego de Zapata (otrora puteado a morir, y con razón), la calidad y el oportunismo de Maxi Moralez, los goles del uruguayo Hernán Rodrigo Lopez, y la compañia de varios a quienes les tocó entrar en diversas circunstancias.

Huracán, por su lado, revivió viejos fantasmas y se quedó sin nada. El equipo que paseó a Racing y a River, entre otros, y dio cátedra de fútbol en varias otras canchas, tuvo a las dos figuras excluyentes del torneo, Bolatti y Pastore, en silencio se metió en boca de todos, y peleó hasta el final. Hoy perdió, y de la peor manera para sus hinchas. Andá a saber cuándo se le da una chance tan clara de nuevo al quemero, que encima ni en las copas pudo entrar. En lo que a mí concierne, una injusticia total.

Velez se instituye así como el cuarto equipo con más títulos del país, igualando a Racing, y demuestra otra vez que si tuviera los hinchas que tiene, por ejemplo, Rosario Central, todo el mundo lo consideraría un grande de ley, y no un serio (quizás el más serio) candidato a la denominación de "sexto". En 20 años logró lo que prácticamente ninguno pudo, salvo Boca.

En otro orden de cosas, sí se cumplio el vaticinio que en este blog se hizo respecto a los descensos: San Martín de Tucumán perdió la categoría en su cancha contra Lanús, y Gimnasia de La Plata jugará la promoción, con Atlético de Rafaela. La otra promoción, la jugará Rosario Central, contra Belgrano de Córdoba.

Así las cosas, terminó el torneo Clausura 2009, que presentó una suba de nivel de juego clarita, respecto al tétrico Apertura que ganara Boca. Varias decepciones, varias revelaciones, confirmaciones y caídas. Ahora un mes infumable sin muchas novedades, salvo promociones, el mercado de pases y el fútbol de veteranos (?).

jueves, 2 de julio de 2009

El León a la final.

Habrá que ver si Estudiantes se baña en la gloria que supo conseguir entre 1968 y 1970 (tricampeón de la copa), o queda una vez más en la puerta como en 1971, o más acá en el tiempo, el año pasado, cuando perdió la Sudamericana (que no se compara en magnitud con la Libertadores, pero el plantel es el mismo) a manos del buen Inter de Porto Alegre de D'alessandro.

Honestamente tengo sentimientos encontrados. Como hincha, amparado por eso que llaman "el folklore del fútbol", no quisiera que los platenses ganaran la copa. Puede ser criticable, sí. Pero también tengo el sentimiento tan argentino de prenderme al éxito de un compatriota. Es una mezcla rara.