Pero esta vez vuelve como DT. Sí, Diego Armando, el Diez, se sienta en el banco de la Albiceleste. De su mano llega la generación que más alto ha llevado a nuestro seleccionado en la historia: la del '86 y el '90. Además, vuelve Carlos Salvador Bilardo al ambiente, como una especie de "secretario técnico".
Grondona dejó de hacerse el pelotudo y por fin hizo lo que, creo yo, siempre quiso hacer: devolverle gentilezas a Bianchi. Si esta vez el Virrey quería asumir, era obvio que no iba a poder ser, ya que el ferretero es alguien que no olvida (cuando le conviene).
Maradona no es precisamente un DT laureado. Sus únicas experiencias como entrenador las tuvo en Mandiyú primero y en Racing después. Ambas olvidables. Pero, por otra parte, es difícil que alguien sepa, acaso, más que él sobre lo que es la Selección y, por qué no, de fútbol. Diego fue (y sigue siendo) el mejor en la historia de la disciplina. El tiempo mostrará su capacidad de transmitir ese saber a sus dirigidos.
Además... Hablamos de Maradona. Su solo apellido representa a todo el país. ¿Riquelme, Messi, Aguero o el que sea, se animará siquiera a retrucarle algo? ¿Alguien duda acerca de quién ganaría la encuesta al más querido por la gente? Él es el único que puede darse ese gusto, sólo por portar el apellido.
En fin, no es el que yo hubiera designado. Pero como se trata de Pelusa, no me opongo. No hay ningún argento, que se precie de tal, que no lo quiera. Hay que bancarlo, por todo lo que nos dio. Acá hay un hincha más, Diego.
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